Construcción de la libertad
“
La cultura es nuestro rostro.
Es eso que permite a los demás vernos y reconocernos: somos esto, somos aquello, somos lo que hemos ido haciendo de nosotros, y esto es la cultura:
lo que hacemos de nosotros.
La cultura, entonces es una construcción. Es lo que una comunidad ha ido eligiendo, el ser que se ha ido dando y que, coherentemente, ha terminado por configurar un rostro. Una identidad, si preferimos decirlo así. Esta identidad la hemos construido libremente.
La cultura, siempre, es una
construcción de la libertad.
……
”
José Pablo Feinmann
2 comentarios:
Buenas.
De nuevo dejo una canci�n, porq al leer el fragmento me acord� de ella. Seguro es conocida por casi todos, sino por su versi�n primera, ser� por la m�s reciente versi�n de Fabiaba Cantilo. Anduve buscando y sali� como single en el �70 y despu�s en el disco "16 grandes �xitos" de Pedro y Pablo(Miguel Cantilo y Jorge Durietz)en 1971.
Por una lado me fascina la sencillez y frescura con la que describe una sociedad, una ciudad, una cultura..
Tambi�n me encanta esa cosa contradictoria, o ambigua, o de contraste tan nuestra, tan ciudad con puerto en la puerta, tan inmigrante y criolla, tan europeos en sudam�rica y tan sudacas en europa..
Por eso y m�s la v� reflejada en las letras de Feinmann, porq plasma las ideas de construcci�n, o re-construcci�n de una generaci�n. Y esa postura de renovaci�n, de novedad, q marc� una sociedad y es cimiento innegable de lo q nos conforma como juventud y como grupo social, de nuestra historia reciente(robando t�rminos). Eso q uno va elijiendo y lo q hace con eso de uno y los dem�s, y lo q construye desde su libertad, la q le toca.
En fin, es tarde, el teclado se convierte en sopa de letras, luego continuo o aclaro..
Saludos.
Yo vivo en una ciudad
Miguel Cantilo.
Yo vivo en una ciudad
donde la gente aun usa gomina
donde la gente se va a la oficina
sin un minuto de m�s
Yo vivo en una ciudad
donde la prisa del diario traj�n
parece un film de Carlitos Chaplin
aunque sin comicidad
Yo vivo en una ciudad
que tiene un puerto en la puerta
y una expresi�n boquiabierta
para lo que es novedad
y sin embargo yo quiero a ese pueblo
tan distanciado entre s� tan solo
porque no soy m�s que alguno de ellos
sin la gomina, sin la oficina
con ganas de renovar
Yo adoro a mi ciudad
aunque su gente no me corresponda
cuando condena mi aspecto y mis ondas
con un insulto al pasar
Yo adoro a mi ciudad
cuando las chicas con sus minifaldas
parecen darle la m�gica espalda
a la inhibici�n popular
Yo adoro a mi ciudad
aunque me acuse de loco y de mersa
aunque guada�en mi pelo a la fuerza
en un coiffeur de seccional
y sin embargo yo quiero a ese pueblo
porque mi incita a la rebeli�n
y porque me da infinito deseos
de contestarles y de cantarles
mi novedad, mi novedad
Qué lindo encontrarte de nuevo por acá, dispuesta a compartir tus reflexiones siempre tan arraigadas en la música y en las canciones.
Sí, es parte nuestra esa tensión tan fuerte que vos marcás, que creo que debe ser comprendida como aquello que nos origina y nos marca. Ese ni tan tan, ni muy muy, parece ser la contradicción legendaria, la que está en nuestra génesis, en nuestros fundamentos.
Construir desde la libertad "que nos toca" -como decís-, da cuenta de la posibilidad de elegir aún en circunstancias y situaciones que no elegimos. Elegimos qué hacer, cómo construir, con quiénes caminar. Con estas elecciones -las grandes y las de todos los días-, hacemos la historia. La que pasó y la que viene, la que está por ser escrita.
Besos!
Publicar un comentario